Abrazar el proceso (una carta para recordarme que todo florece a su tiempo)
Aprenderás —lo prometo— que los procesos no son castigos, sino caminos de transformación.
A veces te desesperas.
Quieres que todo suceda rápido, que los frutos aparezcan, que el esfuerzo tenga forma y aplausos. Y cuando no llega, crees que algo estás haciendo mal.
Pero no.
No todo florece a la